Nos encontramos de nuevo en el estrado que es este pequeño artículo, tratando de nuevamente defender, o por lo menos hacer que el público pueda reconsiderar, a un juego que ha sido últimamente empapelado en reviews y críticas que en los mejores días son mediocres, y en los peores son de calificaciones de uno, dos o tres puntos en la escala correspondiente. Tristemente un juego que en sus avances y trailers se veía prometedor y que faltó a la hora de esforzarse y cumplir con lo prometido, nos referimos a Devil’s Third, entrega de Valhalla Game Studio, liderado por Tomonobu Itagaki, famoso por ser la persona responsable de juegos como la saga Dead or Alive y el reboot pasado de Ninja Gaiden.
Devil’s Third es un juego de acción/shooter lanzado para la consola hogareña de la gran N hace uno o dos meses atrás, se trata de una nueva adición a los ya pocos juegos de acción “Para grandes” que existen en la WiiU, junto a Bayonetta y Wonderful 101. Es un juego basado en combate melee o cuerpo a cuerpo rápido combinado con aspectos de shooter en primera persona, lo cual es bastante poco común, tratándose de un juego desarrollado por un estudio de oriente, estudios que son conocidos por ser ajenos a los trends y a la popularidad de los videojuegos shooters en primera persona, y que son estudios que están generalmente más especializados en otros géneros y otros estilos de jugabilidad.
Ahora, veamos a Devil’s Third y tratemos de averiguar si las críticas que recibió la última entrega de Itagaki son tan fundadas como lo parecen.
“(…) but with Devil’s Third, I’m struggling to really find anything worthwhile here”
“(…) pero con Devil’s Third, me estoy esforzando para verdaderamente encontrar alguna cosa que valga la pena”
-Chris Carter- Destructoid.
Ahora veamos, es verdad que Devil’s Third no se trata de un candidato para Mejor Juego del Año del 2015, de ninguna manera, se trata de un juego que tiene sus fallas y problemas, pero también tiene sus cosas que lo hacen entretenido, y finalmente, para qué uno juega si no es para tener un momento de entretención.
Uno de los puntos más fuertes que tiene Devil’s Third para su defensa es la calidad del combate melee o cuerpo a cuerpo que posee, es verdaderamente satisfactorio y de buena calidad, con un numero competente de armas a la disposición de Ivan (Nuestro protagonista) para poder knockear o decapitar o cortar a los chicos malos. Cada arma se siente bien cuando se ocupa, se controla bien y es satisfactorio el ver todas las posibles animaciones que se produjeron para que Ivan derrote a sus enemigos. Cada arma es también increíblemente competente a la hora de matar gente, ya sea haciéndolos básicamente explotar con un martillo o decapitándolos con una katana. No existe un verdadero “balance” dentro del repertorio de las armas a disposición de Ivan, cada una es igual de competente a la hora de cumplir su trabajo, quizás la única diferencia que haya es que el martillo tiene la capacidad de romper el bloqueo de un enemigo.
Es aquí donde ya vemos un punto a favor del juego en cuestión, el melee de Devil’s Third se asemeja, pero en ningún momento se compara o se empareja, con el combate de otros juegos de acción como Bayonetta o la saga de DMC -antes del cagazo de Ninja Theory-.
Tristemente, este mismo combate melee se encuentra eclipsado por el repetitivo combate de shooter, y la verdad es que usualmente no tengo problema con los FPS, me considero un fan de ellos, pero el combate a disparos de Devil’s Third se caracteriza por ser poco imaginativo y repetitivo, mostrando dos cosas; la primera es que tomó verdadera valentía en el hecho de que un estudio de oriente se haya adentrado y haya tratado de recrear un shooter, género en el cual los estudios japoneses tienen poca costumbre de realizar, y segundo, que tristemente demuestra lo poco ávidos y poco acostumbrados que son los estudios de oriente a la hora de crear juegos de este género.
Pero aun así, con el combate FPS y todo, el combate melee de Devil’s Third es de calidad y superior al de un juego AAA del mismo género, pero producido por un estudio de occidente.
“(…)Despite the occasional laughs and wonderfully weird multiplayer modes, Devil’s Third is near-impossible to recommend.”
“Sin importar las risas ocasionales y los modos multijugador maravillosamente raros, es casi imposible recomendar Devil’s Third”
-Sean Bell. GameSpot
La verdad es que en factor calidad, Devil’s Third me recuerda mucho a otro juego que es también reconocido por su mala calidad, pero a diferencia del juego de Itagaki en cuestión, se le reconoce como un hit de culto: Me refiero a Deadly Premonition, un juego con claros problemas de framerate y jugabilidad, pero que posee una especie diferente de encanto, y que es capaz de entretener a jugadores ya sea accidentalmente o con la intención de hacerlo. Y es precisamente esa la razón que me acuerda a Devil’s Third, ya que este último también tiene un puñado de momentos humorísticos, ya sean accidentalmente o diseñados con la intención de sacar una risa del jugador.
La historia de Devil’s third no es sublime en ningún sentido, es bastante mediocre, pero eso no impide que sea tan mala que sea buena, lo que es el argumento más tonto que he podido escribir, lo sé, pero aun así este argumento cliché sostiene un poco de veracidad cuando se trata de juegos de dudosa calidad, si es que jugamos Devil’s third, no esperando nada y simplemente disfrutándolo irónicamente, podemos toparnos con un juego que se asemeja más a una parodia de los juegos cliché de acción, aunque esta parodia sea accidental e inintencionada.
Es de esta manera que se le puede dar diferentes perspectivas a Devil’s Third, que, nuevamente, aclaro que no es ni será material de GOTY, pero aun así es un juego que tiene la capacidad de ser disfrutado, aun cuando sea irónicamente y que esta no haya sido la intención del equipo detrás de la producción del juego.