Ya va a cumplirse el primer mes de 2015, pero en IRGamers todavía no hemos dado vuelta completamente la página y queremos recordar por última vez algunos de nuestros juegos favoritos del año que pasó. Para esta serie de artículos, cada miembro del staff ha elegido los 3 juegos que más disfrutó durante el 2014, sin importar si fueron o no lanzados durante el año. En esta primera parte AlexWheeler, TheRealPhenom y Aero nos traen sus elecciones de lo que fue su 2014.
AlexWheeler
Mario Kart 8
Uno de los esperados de WiiU. De los primeros juegos en iniciar el empujoncito de ventas que hoy en día vive la consola. Las carreras más locas del mundo de los videojuegos se encuentran en Mario Kart y, como siempre, no podía dejar pasar la oportunidad de comprarlo de salida. Había visto más bien poco sobre él, me gusta llegar… eh, ¿virgen? al videojuego. Tenia la intención de no spoilearme mucho sobre las pistas y experimentar la sorpresa de ver cada circuito en la pantalla de mi televisor, sobre todo cuando consideramos que es el primer Mario Kart en alta definición.
EL juego de conducción por excelencia de Nintendo no dejó indiferente a ningún poseedor de una WiiU. Mario Kart no pasa de moda hasta que sale la siguiente entrega. También le he dedicado muchísimas horas durante el 2014 desbloqueando todo el contenido primeramente y luego sumando horas de juego puro, con amigos, familia y en el online. Si bien no me dejó del todo conforme el plantel, está variado. Peca de darle mucha cabida a los babys y a las formas alternas de Mario y Peach. Gran Cantidad de personajes seleccionables, gran cantidad de pistas nuevas y otras remasterizadas, dlc a precio más que justo para aquellos que deseen expandir el contenido, posterior compatibilidad con amiibo, un online muy fluido e intuitivo, juego local para 4 a pantalla dividida, etc. Se hizo esperar algo, como todos los juegos de Nintendo, pero el resultado es más que satisfactorio y de seguro seguiré jugándolo todo el 2015 y quizás por años más hasta que salga la sucesora de WiiU y nos traiga consigo un nuevo retorno de Mario y Cia. a las pistas. Lo único malo es no poder jugar de a dos usando una pantalla cada uno (Televisión y Gamepad) y la inesperada ausencia de Diddy Kong.
Plantas vs Zombies 2: It’s About Time
Como muchos, esperé durante largo tiempo la versión para PC de Plants vs Zombies 2: It’s about time. No llegó nunca. Tuve que jugarlo en el móvil, cosa que no acostumbro hacer, pero que ha valido la pena. Plantas vs zombies 2 lleva a su máxima potencia la fórmula conocida en su precuela, pero la revitaliza con un puñado generoso de contenido. Empece a jugarlo cuando habían 5 mundos. Hasta la fecha son 7 y podrían seguir actualizando con más.
El carisma de Crazy Dave está de regreso para aconsejarnos en todo lo innecesario, como buen vecino, y lo mejor de todo es que está más loco que nunca. El aire desenfadado y divertido del primer Plantas vs Zombies sigue estando en I’ts About time pero con un abanico de modificadores en la formula que dan la vuelta de tuerca necesaria para que no sea simplemente mas de lo mismo. El juego ofrece micro transacciones, pero descontando algunas plantas que son las mínimas y que tampoco son la gran maravilla, TODO se puede conseguir simplemente jugando. Algunas pantallas de publicidad pueden aparecer de vez en cuando, pero curiosamente suelen ser del juego mismo. Almanaque con descripciones muy curiosas de tus plantas y de los zombies, Jardín Zen para cultivar plantas, modo rompe jarrones, zonas de juego infinito, eventos online que varían según la temporada y muchas frases locas han hecho que me divierta mucho horas con Plantas vs Zombies 2: It’s about time. Si sumamos todo lo nuevo, consigues un juego muy gratificante, muy divertido y rejugable que ademas no te costará un peso. Lo único malo es no poder jugarlo en PC, o en mi consola.
Bayonetta/Bayonetta 2
Para mí el primer Bayonetta fue uno de esos juegos que te resultan atractivos… de la consola que no tienes. Y por esa misma razón no pude jugarlo completo, lo probé en la consola de un amigo, pero solo eso. Y para cuando se anunció la secuela exclusiva para Nintendo no pude hacer otra cosa más que alegrarme, aunque no contemplé su compra hasta que anunciaron que el primer Bayonetta vendría incluido. Fue cuando supe que no tenia excusas para dejarlo pasar.
Empecé obviamente por la primera parte y ya que no tenía muy fresco el recuerdo de las veces que lo testé, me resultó agradable sentirlo nuevamente (sobretodo a 60fps). El universo de Bayonetta me cautivó rápidamente, sobre todo por su diseño de personajes, tanto sus personalidades como su diseño visual. Es imposible no dejar de sorprenderte con los personajes, ya que están constituidos con mucho cliché, pero se aceptan fácilmente y no por eso el resultado final acaba en un cliché también. Esa sensación de que la protagonista no se toma nada ni a nadie en serio, es una de las principales cosas que me han hecho disfrutar del mundo de Bayonetta. Su capacidad de ironizar, de despreocuparse, esa hilaridad que genera en el jugador. Pasar del 1 al 2 sin un intervalo amplio de tiempo me hizo sentir como cuando no has visto ninguna entrega de una película y te das el tiempo de hacerte un maratón propio y ver todo. Finalmente sentí ambas entregas como una unidad, como un capítulo extendido que divierte y que no se siente forzado. Estoy completamente dispuesto a jugar una tercera entrega si se llega a realizar (lo veo difícil), pero si me gustaría esperar más tiempo, dejar descansar un poco el recuerdo de este episodio largo que jugué el 2014. Después de todo quedan algunas lágrimas de Umbra por desbloquear y el discreto modo online también tiene su algo. Lo único malo, sus bajas ventas. Realmente no tiene lo que merece.
Puede que no sean los mejores juegos del 2014, pero sí son con los que mas me divertí durante el 2014. Mención especial al Smash Bros, que es una pasada, pero salió a finales de año. Y aun no he tenido suficientes horas de juego como para darle un lugar en este top 3. Seguro el 2015 queda fijo en el podio.
TheRealPhenom
Payday 2
Uno de los juegos que más disfrute el pasado 2014 fue el épico simulador de robos bancarios que es Payday 2. Segunda entrega del estudio Overkill luego del considerable éxito que fue Payday: The Heist. Payday 2 es un FPS en el cual tomamos el control de un ladrón, dentro de un equipo de 4, y hacemos todo lo posible para cometer exitosamente distintos robos y atracos. El núcleo de su gameplay se podría aproximar a otros éxitos en PC como Left 4 Dead y Killing Floor, en el sentido de que se forma un grupo pequeño de jugadores y se los pone en contra a diferentes oleadas de “mobs” o enemigos. Una de las principales mejoras de Payday 2 en cuanto a su predecesor es la capacidad de realizar un gran número de robos de una manera sigilosa, sin alertar a nadie… O “silenciando” a aquellos que se alerten.
Si prefieres el lado más violento y más ruidoso, puedes equiparte con tu mejor chaleco anti-balas, tu mejor arma primaria y secundaria y ver qué tantos policías puedes echarte en la espalda antes de que un Bulldozer te de un escopetazo en la cara.
Todo esto, más toda la costumización posible de Payday 2, desde mascaras hasta skills hasta tus armas e ítems utilizables, hicieron que Payday 2 fuera una de mis grandes experiencias del 2014.
Bravely Default
Casi partiendo el año mi billetera sufrió un paraguazo bastante grande al verme básicamente obligado a comprar la versión de colección de Bravely Default, pero no me arrepiento, es la prueba de que Square aún puede crear RPG’s de calidad y que el mercado occidental añora los viejos Jrpgs de antaño como Final Fantasy 5. Con su respetable historia, aunque un poco trillada, y su excelente gameplay a base de Jobs, Bravely Default se transformó en, si no me equivoco, el primer juego nuevo que jugué el 2014. Quedé de sobremanera contento al ver toda la información que podía leer con solo poner el juego en pausa e ir bailando de menú en menú, con un bestiario con todos los enemigos del juego, más los jefes, más las formas verdaderas de los jefes, más descripciones de armas y de ítems, mas descripciones de Jobs, todo encendió un gusto muy personal por esta preocupación del detalle que es tan ignorada hoy en día.
El factor social era bueno, en el sentido de que no afectaba el gameplay de sobremanera, eh, tienes una villa, máximo de 20 habitantes, haces streetpass y te dan habitantes, construye cosas para hacer tienda para comprar ítems, eh.
Honestamente no lo terminé, hay un punto específico en la trama del juego en el cual mi reacción fue “¿Ah, sí? Eh no, mejor me voy”. Y aun se sienta en esa cajita en la cual venía, dentro de otra cajita… con… cartas y el soundtrack y un artbook… 50 lucas.
The Stanley Parable
The Stanley Parable es uno de esos, aptamente llamados, walking simulators, pero de este tipo de juegos es sin duda el mejor. Con increíble narración que abarca desde la mundanidad del día y lo poco importante que son nuestros actos hasta el completo absurdo. The Stanley Parable fue una experiencia increíblemente entretenida por la cual pasar, y jugar de nuevo. El juego tiene alrededor de 13 endings y la mayoría de ellos son chistes internos, un ending del juego es glitchearse fuera del mapa, qué tan cool es eso.
The Stanley Parable pasó de ser un mod a ser un excelente juego experimental, que me mantuvo sentado tratando de lograr diferentes finales, o simplemente me agarró con lo entretenido y la calidad de su narración.
Aero
2048
2048 es ese juego que me ayudó a pasar el tiempo fuera de casa y me robó tiempo dentro de ella. Es adictivo, está bien pensado, te produce satisfacción al llegar a nuevos objetivos y, lo más importante, está a la mano, por lo cual se me hizo irresistible jugarlo durante gran parte del año. En la universidad, en el metro, en viajes, en todos lados. Lo genial es que a los pocos intentos llegué a 2048, no me pareció la gran cosa, pero lo realmente divertido fue ir superándome después de eso. Si recuerdo bien, lo máximo que llegué fue a 16384, con un 8192 al lado. Es genial cuando todo te sale bien, es frustrante cuando se mete un 2 en medio de todo tu juego y es una buena manera de mantener activa la mente no teniéndola activa. Lo dejé de jugar a mitad de año, y en diciembre volvió a mi, y de paso mi mamá quedó ADICTA (En serio, no lo suelta en los tiempos libres y llegó gritando a mi cuando logró el ansiado «2048»), junto a mi hermana y algunos de mis tíos. Basta una buena idea para hacer de un juego entretenido, de eso no hay duda.
Valiant Hearts
Cuando por primera vez vi este juego en la conferencia de Ubisoft del año pasado, supe de inmediato que se trataba de algo especial. No es usual que un trailer haga ese impacto en mí, pero lo hizo y, afortunadamente pude probarlo tan solo un día después, y juro que busqué este juego especialmente (y fue difícil encontrarlo, dado que estaba en el booth de Sony, no en el de Ubi). Me encantó. Naturalmente, unas semanas después, cuando salió a la venta, lo compré sin pensarlo. Y no me arrepiento. Valiant Hearts es de esos juegos que causan una impresión, pues tienen alma, transmiten el sentimiento de sus personajes y te hacen querer continuar solamente para saber si será posible que logren sus objetivos. Es además un título en el que uno se detiene a disfrutar de cada elemento, desde su estilo gráfico notable hasta una banda sonora que hoy sigo escuchando de vez en cuando. Valiant Hearts es crudo, pues representa ferozmente lo que significa realmente una guerra y no se queda con las convenciones que han establecido los videojuegos alrededor de esta temática. No es un juego tan largo, por lo que en realidad representó una pequeña fracción de lo que jugué durante 2014, pero sí causó el suficiente impacto como para coronarlo como uno de los juegos que más disfruté durante el año que recién pasó.
Dance Central: Spotlight
South Park, Tropical Freeze, Killer Instinct, Smash Bros, Mario Kart, The Last of Us, NES Remix, Fenix Rage, Pokémon Alpha Sapphire, entre tantos otros títulos son parte de mi lista de juegazos que disfruté enormemente durante el 2014. Sin embargo, Dance Central se lleva el spotlight en esta ocasión. Lo jugué hasta el cansancio (literalmente), gasté mucha más plata en canciones de lo que estoy dispuesto a reconocer y no me arrepiento de nada. Hasta hoy reviso cada martes qué canciones nuevas hay disponibles y no dudo en comprarlas si es que son de mi agrado. Muy a mi pesar estoy lesionado al momento de publicar este artículo, así que debo aguantarme las ganas de pararme a bailar en este mismo instante. En un análisis más profundo, creo que Dance Central me ha servido también para llenar el vacío que dejaron los instrumentos de plástico que ya no ocupo. Guitar Hero, Rock Band, vuelvan pronto.
Este ha sido el final de esta primera patita, pero pueden continuar leyendo la segunda parte de Nuestro 2014, que ya se encuentra disponible, en donde Index, Usleon y Daziman nos cuentan cuáles fueron sus elecciones del año pasado. Adicionalmente, ya pueden leer la última y final parte con Nemesis, Celenor y Fark, pero también queremos saber: ¿Cómo fue tu 2014?