En checkpoint evocamos algo que forma parte del pasado de los videojuegos, ya sea un juego en particular, una curiosidad, un pequeño detalle que recordamos hasta hoy o simplemente una experiencia personal. Checkpoint es simplemente ese lugar, ese momento, que queremos dejar guardado en nuestra memoria.
En esta oportunidad, en anticipación al nuevo Zelda que veremos pronto en el E3 de este año, hemos querido rendir homenaje a la emblemática serie de Zelda en su aniversario número 30. Y es que a gracias a su condición como una de las franquicias más reconocidas del medio, ha marcado a muchas generaciones, haciendo que el primer juego de cada persona pueda ser diferente. Es por esto que hemos reunido a parte del staff de IRGamers y, como invitados especiales a NDeluxent, y les preguntamos: ¿Cuál fue tu primer Zelda?
Aero (y Nemesis)
Pese a que tengo algunos recuerdos difusos de haber jugado parte de Zelda II y de Majora’s Mask en un emulador de computador sin lograr mayor progreso en ninguno de los dos casos (más tarde en mi vida los terminaría ambos), mi primera verdadera experiencia fue más bien reciente y fue compartida con Nemesis, así que se podría decir que escribo a nombre de los dos. Nuestro primer Zelda de principio a fin fue The Legend of Zelda: Twilight Princess, un juego que pedimos para GameCube en navidad y nos llegó para Wii, sin tener la consola. Por supuesto, lo cambiamos, pues no habían planes inmediatos de comprar una Wii.
Fue una buenísima experiencia, pues tal como solíamos hacer cada vez que pasábamos algunos meses juntos en vacaciones, nos fuimos turnando para jugarlo, por lo que aquello que no veía uno en un puzzle, lo veía el otro. Me atrevería a decir que jugarlo de esta manera lo hizo automáticamente memorable para ambos, pues el recuerdo es compartido y nos fuimos sorprendiendo juntos de lo que ofrecía este mundo en cada paso que dábamos hasta llegar a un final que ambos recordamos como épico y único, pese a que en retrospectiva pareciera que no es del gusto de todo el mundo. De hecho, volvimos a repetir este modo de juego en Skyward Sword y pretendemos hacerlo de nuevo con el próximo juego de Wii U.
Ah, y tranquilos, a nombre personal, con el tiempo he ido pagando deudas históricas con la franquicia.
TheRealPhenom
El primer juego de Zelda que jugué fue The Minish Cap para GBA, desde ese momento que ese juego se transformó en mi Zelda favorito. Lo jugué con una persona querida, haciendo la experiencia aún más profunda. No tuve la oportunidad de jugarlo en una GBA de verdad, si no que en un emulador en un viejo computador, disfrutar el juego sentado lado a lado mientras buscábamos algunas guías en la internet del 2005, riéndonos y comentando el juego. Como dato interesante, al jugarlo en emulador casi nunca apretamos los botones L o R, ni por accidente, lo cual conllevó a que nos quedáramos horas y horas estancados sin saber qué hacer, porque no sabíamos cómo fusionar Kinstones…
AlexWheeler
Yo el primer Legend of Zelda que jugué fue Minish Cap. Lo jugué en emulador hace años. Estaba en inglés y yo no entendía nada. En realidad tampoco quería entender, solo pasaba de largo los diálogos. Aun así me encantaba el juego, sobre todo esa mecánica de volverse pequeñito para acceder a lugares ocultos. Me acuerdo que cuando no estaba jugando y estaba en otros asuntos me distraía mirando los rincones de casa buscando sitios por donde pudieran transitar los Minish, así de loco me tenia el juego. No logré terminarlo la primera vez que lo jugué, me quedé eternamente estancado varias veces, lo que me tuvo jugando el juego por casi un año hasta que finalmente lo dejé. Ya de grande, cuando el programa de Embajadores de Nintendo 3DS regaló algunos juegos, me sorprendí gratamente al ver que entre ellos estaba el Zelda Minish Cap. Lo jugué nuevamente, ahora con mayor fluidez, y con el mismo entusiasmo de antes y pude finalmente finalizarlo. Lindos recuerdos.
Daziman
Una de las cosas en que me «destaco» en mi vida privada, cosa que mis amigos se ríen bastante, es la poca memoria para algunas cosas, olvidándome por ejemplo de cosas tan importantes como hace cuanto conozco a mis amigos, cuando aprox. nos hicimos amigos, la última vez que nos juntamos y cosas así. Con respecto a cuál fue nuestro primer Zelda… lamentablemente no tengo recuerdos muy concretos. Seguramente debe haber sido el «Zelda: A Link to the Past» por la fecha, yo tenía SNES y un par de amigos también, pero no tengo recuerdo alguno. Se que jugué después por los años «Zelda: Ocarina of Time», pero no tengo demasiados recuerdos u emociones al respecto… lo único que me acuerdo era que me ENCANTABA PESCAR, esa era mi mayor pasión.
Después, lo que sí me acuerdo y seguramente porque lo jugué más y yo lo tenía, eran unos rom de Game Boy Color en el computador, por lo que pude jugar por bastante tiempo «Zelda: Link Awakening DX», incluso lo jugué con una versión pirata que usaba algunos sprites de Pokémon, el escudo era un metapod, entre otros. También jugué por ese tiempo Zelda: Oracle of Seasons/Ages en el mismo emulador. Aunque el primero que me pasé y disfruté bastante fue el «Zelda: Minish Cap». Ese fue el primero que me atrapó fuertemente y pude terminar, ya que el resto lo dejaba abandonado rápidamente. Como verán, no he sido un muy buen fanático del universo de Link, pero he jugado varios juegos y prefiero más las versiones «Toon» o portables de Zelda, que son bastante más cortas, livianas, casuales y fáciles.
Maximiliano (NDeluxent)
Nuestro primer Zelda fue el mítico Zelda: Ocarina of Time. Con mi gemelo teníamos 8 años y nuestro hermano mayor 13 cuando descubrimos aquel maravilloso mundo. Ocarina of Time lo descubrimos gracias a nuestra querida madre. Teníamos un 64 (¡qué momentos vivimos con él!) con algunos juegos, como dos máximo (intercambiábamos los que terminábamos), entre esos estaba Ocarina of Time. No queríamos jugarlo, lo habíamos probado y nos pareció algo complejo, lo habíamos dejado completamente tirado. Sin embargo, un día nuestra madre vio que no lo jugábamos y ella se puso a jugarlo sola (solo el inicio); Luego de probarlo nos dijo: “¿Por qué no lo juegan? Los paisajes son hermosos, y si es muy difícil deben seguir intentándolo, ¡Descubran!”. Esa pequeña, pero profunda frase nos hizo abrir los ojos.
Como estaba en inglés nos costó avanzar en un inicio, pero descubrir el agujero donde yacía la Espada Kokiri fue mágico, y luego ver al portentoso Gran árbol Deku fue más mágico aún. No obstante, las emociones no se quedarían allí. Al acabar con Gohma y ver como el Árbol Deku fallecía fue triste. Esa tristeza quedaría mermada cuando llegamos por primera vez a Hyrule (lo de Saria no nos afectó mucho). Esa sensación fue inefable, el juego estaba completamente libre. De ese modo seguimos avanzando, y durante toda la aventura nos sucedieron hechos muy curiosos, pero que contarlos por acá haría que esto se alargase demasiado. Solo puedo resumir estos hechos curiosos: No seguimos el orden normal de los acontecimientos del juego (no conseguimos la Túnica Goron, el Templo del Agua lo pasamos antes que el Templo del Fuego; El Templo de las Sombras lo superamos sin el Lente de la Verdad; y un sinfín de sucesos). Por último, mencionaré que la banda sonora del juego hasta hoy nos saca lágrimas el oírla. Y eso es lo que podemos contar sobre nuestro primer Zelda, Ocarina of Time, el cual es nuestro Videojuego favorito, y ningún juego ha logrado hacernos sentir lo que nos hizo sentir Ocarina of Time.
Así como ven, independiente de la edad de cada uno, los puntos de partida con una franquicia, ya sea Zelda o cualquier otra, pueden ser extremadamente diferentes. Todos los meses llega un nuevo Checkpoint a IRGamers.cl: ¿Cuál es el juego que más tiempo hemos jugado?, ¿Cuál es el origen de nuestros alias? y más es parte de lo que nos hemos cuestionado estos últimos meses.